En cuanto a la reproducción asexual, obviamente no presenta variabilidad genética, así que no requiere de polinización, ni fecundación. En su lugar, se lleva a cabo mediante distintos mecanismos, como son:
- Esporulación. Se llama así a la generación de esporas, las cuales pueden ser de muy distinto tipo, y que están preparadas para resistir a las condiciones adversas del medio ambiente hasta que haya humedad suficiente para germinar. Dichas esporas poseen el genoma entero de su progenitor y crearán por lo tanto individuos idénticos a éste, o sea, clones, que perpetuarán la colonia.
- Gemación. Se trata de una división desigual de las células del individuo que se reproduce, generando otro idéntico a sí mismo a partir de alguna protuberancia o estructura corporal que, una vez llegado el momento, podrá crecer y separarse del progenitor para comenzar una vida independiente, o permanecer adherido y comenzar una colonia.
- Propagación. En este caso la reproducción se lleva a cabo mediante estructuras usualmente subterráneas, que engendran individuos nuevos pero adheridos corporalmente a sus progenitores. Es el caso de los tubérculos, los rizomas o los bulbos.
- Apomixis. Es una forma de reproducción asexual mediante semillas, disponible para algunas plantas solamente, en la que se producen semillas sin fecundación ni polinización, sino únicamente replicando el genoma del progenitor, o sea, semillas clónicas.